Por: Irma Ustariz
Los logros culturales que se generaron en la civilización del siglo XX, correspondían a una visión de la vida contemplativa en la que se produjeron grandes logros en todos los aspectos del desarrollo humano. A que nos referimos al ser contemplativos, teníamos que ser creativos e inventivos, para realizar grandes obras en ciencia, tecnología, comunicación, viajes a la luna, educación, satélites colocados en el espacio, arquitectura…En pro de la humanidad. De acuerdo a una de las tesis principales del profesor de filosofía y arte Byung Chul Han, de la universidad de las artes de Berlín, y uno de los pensadores más notorios del siglo XXI. En la posmodernidad perdimos esa capacidad de contemplación.
La capacidad de escuchar a otros o experiencia del ser para poder contemplar las cosas bellas que tiene el planeta, la propiedad de asombrarnos, consiste en la capacidad de abstracción y concentración en lo que hacemos yobservamos. El nuevo paradigma de la sociedad actual, consiste en realizar muchas cosas a la vez, lo cual hace dispersar la atención en varias tareas y perdemos la capacidad de contemplación y se salta el proceso de observar, pues al excluir parte del proceso contemplativo nos perdemos de integrar todas las maravillas que ocurren a nuestro alrededor, ya que la atención se enfoca en los detalles.
Han, en su obra la sociedad del cansancio, una de las más polémicas se refiere a los nuevos modelos de socialización con los sistemas al margen de las relaciones humanas. La hipercomunicación, la sobreinformación, el individualismo, el narcisismo, el neoliberalismo, el consumismo…
Este nuevo paradigma social, produce una serie de enfermedades neurológicas, como la depresión, el cansancio, agotamiento laboral, síndrome de déficit de atención, por solo nombrar algunas las cuales conllevan a un exceso de positivismo en el que todo se puede, como es el caso de los mensajes de auto ayuda, por ejemplo la tendencia de auto exigirse siempre más de lo que aspiras. Si piensas en comprar una casa modesta en un lugar agradable y armónico, los mensajes posivistas se te induce a que debes desear o tener una casa de lujo con piscina sin fin, varios estacionamientos para cinco vehículos, con campo del golf, en una residencia de lujo porque eso te hará marcar la diferencia y te dará estatus. Pues tú puedes.
Igualmente, hacerle creer a la gente que algunas enfermedades son producto de sus propias ideas, asimismo el fin de los vínculos afectivos y sociales, el Multitasking (hacer muchas cosas o actividades a la vez), de manera automática o sin un razonamiento reflexivo, para lo cual requiere tiempo y autoexploración, la sobre saturación de estímulos, lo cual produce cansancio a nivel mental.
En la sociedad contemporánea o sociedad del rendimiento debemos poder hacer, debemos tener todo del conocimiento porque tenemos Internet, debemos ser autónomos con nuestra voluntad podemos lograr todas las cosas materiales que nos propongamos, lo cual termina en agotamiento o burnout, forzarte al máximos del rendimiento sin razonamiento, en la actualidad la sociedad del rendimiento ve al individuo como una cosa o maquina generadora de nuevas ideas y proyectos, el sujeto del rendimiento es más rápido y productivo.
La sociedad del rendimiento, no es una sociedad libre más bien produce nuevas obligaciones, es a su vez amo y esclavo, víctima y verdugo que se explota asimismo. Esta narrativa de libertad con rendimiento se analizan creencias como tú debes, tu puedes y la persona empieza a desarrollar nuevas patologías que Han llama enfermedades neuronales como depresión, trastorno límite de la personalidad, trastorno por déficit de atención y el síndrome del desgaste ocupacional. Hemos pasado de las enfermedades e infecciones en el organismo a infartos en el alma. Ataques cardiacos, esquizofrenia, como enfermedades del siglo.
Esta nueva etapa civilizatoria nos induce a la realización de múltiples tareas o Multitasking, lo cual ha sido un retroceso al primitivismo, como forma de vida para protegerse de los depredadores, por tanto se ha perdido la atención y concentración en los detalles, durante las tareas y proyectos que se llevan a cabo, lo cual se deriva en una sociedad del cansancio y el agotamiento tanto físico como mental, debemos reconocer que el ser humano tiene sus límites.
Como me veo reflejada en este nuevo modelo de sociedad, que me ha llevado hasta los límites del suicidio, como ella nos deja un sin número de roles para los no tienes tiempo de pensar si estás preparado o no, si tú capacidad como ser humano te permite pararte en frente de ti mismo y decir podré..... Es lo que realmente quiero es justo y necesario, donde los otro te dicen hazlo tú puedes detrás de ti miles llevándote a abismo de desesperación y frustración insospechados excelente artículo gracias por recordarme lo
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